Si en 1976 Miguel Angel Revilla Roiz paralelamente a la noble búsqueda de un marco autonómico para la entonces provincia de Santander consideró imprescindible solicitar el reconocimiento de un concierto provincial a semejanza del que disfrutaban tanto Navarra como Alava,que pervivieron a la larga noche del franquismo,demostrando que ni una dictadura totalitaria pudo acabar con un sistema tan arraigado en el pueblo vasco, nosotros, que disfrutamos de el como elemento que oxigena y da sangre a nuestro marco de Autogobierno no podemos sino defenderlo. Y afirmar con rubor que puede ser objeto de exportación, pero no de imposición. Ni hacia afuera ni hacia adentro. Sin concierto no hay autonomía.

El estado de la cuenta de usuario es Aprobado